La mayor parte de nuestros estudiantes pertenecen a la llamada generación digital, y por tanto, son considerados «nativos digitales» (Prensky, 2001) por haber crecido con las tecnologías digitales, lo que ha naturalizado su uso. La mayoría nacidos después de los años 90, tienen en general una gran habilidad para usar los ordenadores, los videojuegos e Internet, y son consumidores y productores de todo lo que hay en la red. Más específicamente, entre otras características: prefieren la imagen al texto y recurren a ella para comunicarse e informarse; tienden a hacer más de una tarea a la vez, prefieren abordar cada situación como si fuera un problema; tienen la necesidad de obtener feedback inmediato; y prefieren instruirse de forma lúdica (Prensky, 2001; 2011). A pesar de estas habilidades, tienen dificultades para resolver un problema siguiendo unos pasos estructurados, utilizando el análisis deductivo y el conocimiento previamente adquirido. Su lectura es más bien superficial, lo realizan, en general, a partir de fuentes digitales como la prensa. Un tipo de fuente estructurada para permitir una lectura rápida de titulares, ver muchas noticias en vídeo, y que no promueve profundizar sobre los hechos (Yubero y Larrañaga, 2017). En relación con sus costumbres de lectura, una encuesta de 2017 sobre estudiantes universitarios del Grado de Primaria, Educación Social, Trabajo Social y Humanidades, presenta que un 88% de los entrevistados, ni usaban, ni conocían las revistas científicas, mientras que un 38 % pensaban que estas podían ser interesantes para su formación (Yubero y Larrañaga, 2017).
Este proyecto tiene el objetivo de ofrecer a nuestros estudiantes unos materiales (audiovisuales) más en consonancia con sus necesidades y características (su preferencia por la imagen) pero a la vez para incentivar unas habilidades relacionadas con sus carencias. En particular, relacionadas con la lectura de textos escritos (bibliografía propuesta desde las asignaturas de los diferentes grados) incentivando el abordaje guiado, paso a paso, analítico y de feedback diferido. Es sabida la importancia que tiene, desde un punto de vista cognitivo y socio-cultural, leer y saber leer. Según Cassany (2006) leer es comprender, y por ello, es necesario desarrollar diversas destrezas mentales o procesos cognitivos: anticipar qué dirá un escrito, aportar nuestros conocimientos previos, elaborar hipótesis y verificarlas, construir inferencias para comprender lo que sólo se sugiere , etc. El significado del texto ni aloja en las palabras ni es único. Se sitúa en la mente del lector. Se elabora a partir de conocimientos previos que este aporta y requiere de habilidades cognitivas implicadas en el acto de comprender.
Por otra parte, al leer también adoptamos una actitud concreta y un punto de vista como lectores, y utilizamos unos estilos de pensamiento preestablecidos para construir unas concepciones concretas sobre la realidad. Así lo leemos configura nuestra identidad individual, social y en el caso de los estudiantes universitarios también su identidad profesional. Con la promoción de la lectura, el presente proyecto de innovación se propone activar todos estos procesos que los jóvenes nativos digitales no suelen estimular. Todo a partir de captar su atención e interés a partir del material audiovisual seleccionado y / o elaborado por el profesorado.
El proyecto se propone tres acciones principales:
- La selección de recursos audiovisuales que puedan ayudar al abordaje de la bibliografía.
- La elaboración de mini vídeos que orienten el abordaje de obras clave de la bibliografía.
- La elaboración de mini vídeos genéricos que ilustren sobre el tipo de obras de necesaria consulta en cualquier campo profesional o científico (p.e. estructura de un artículo científico, de divulgación, etc.).
En resumen, el objetivo del proyecto es la elaboración de vídeos genéricos y también de específicos vinculados a las obras de consulta obligatoria estipuladas en las asignaturas.