(adaptación libre de Qualcuno era comunista de Giorgio Gabber).

..

Alguno era profe comprometido porque había estudiado Historia o Ciencias Ambientales.

Alguno era profe comprometido porque mamá, la abuela, la tía…papá, no.

Alguno era profe comprometido porque veía las TIC como una promesa, el trabajo por proyectos como una poesía, la escuela pública como el paraíso educativo.

Alguno era profe comprometido porque se sentía solo.

Alguno era profe comprometido porque había tenido demasiados profesores no comprometidos.

Alguno era profe comprometido porque la sociedad lo exigía, la crisis económica lo exigía, el fracaso escolar lo exigía, PISA lo exigía….lo exigían todos.

Alguno era profe comprometido porque se lo habían dicho.

Alguno era profe comprometido porque no se lo habían dicho… todo.

Alguno era profe comprometido porque antes…antes…antes…era un profe pasota.

Alguno era profe comprometido porque había entendido que la renovación pedagógica iba despacio, pero lejos.(?)

Alguno era profe comprometido porque Freire hizo lo que hizo.

Alguno era profe comprometido porque Wert hizo lo que hizo.

Alguno era profe comprometido porque era sabio, y adoraba a los chavales.

Alguno era profe comprometido porque se tomaba unas cervezas y se conmovía en las escuelas de verano y los encuentros de formación de profesorado.

Alguno era profe comprometido porque era tan cínico que necesitaba algo en que creer.

Alguno era profe comprometido porque estaba tan fascinado por el conocimiento que quería estar allí donde se producía.

Alguno era profe comprometido porque quería dedicarse a la gestión educativa y salir del aula de una vez por todas.

Alguno era profe comprometido porque quería divertirse y pasarlo bien en clase.

Alguno era profe comprometido porque la revolución educativa, hoy no, mañana quizás, pasado mañana, seguramente.

Alguno era profe comprometido porque el Ministerio, las leyes educativas, la burocracia…

Alguno era profe comprometido por molestar a su jefe de departamento o su director.

Alguno era profe comprometido porque pasaba horas en Twitter.

Alguno era profe comprometido porque había visto demasiadas veces “Ser y tener” y “El Club de los poetas muertos”.

Alguno era profe comprometido por moda, alguno por principios, alguno por frustación.

Alguno era profe comprometido porque quería educarlo todo.

Alguno era profe comprometido porque no conocía los gurús educativos, formadores de formadores, expertos educativos y demás.

Alguno era profe comprometido porque había cambiado el libro de texto por el evangelio según Ken Robinson.

Alguno era profe comprometido porque estaba convencido de estar protegiendo el alumnado y las familias de los desmanes del mercado y las desigualdades.

Alguno era profe comprometido porque era más comprometido que los demás.

Alguno era profe comprometido porque estaban los planes de mejora educativa e implantación de las TIC.

Alguno era profe comprometido a pesar de que estuvieran los planes de mejora educativa e implantación de las TIC.

Alguno era profe comprometido porque no había nada mejor.

Alguno era profe comprometido porque no había familias comprometidas.

Alguno era profe comprometido porque “tenemos un sistema educativo desastroso”.

Alguno era profe comprometido porque no podía más de clases insoportables en las que nadie aprendía nada y reuniones en las que nadie hablaba de nada.

Alguno era profe comprometido porque los exámenes, los deberes, los PI , las AC, las programaciones, las repeticiones, etcétera, etcétera.

Alguno era profe comprometido porque quien estaba en contra, era profe comprometido.

Alguno era profe comprometido porque ya no soportaba aquella cosa sucia que nos obstinamos a llamar Educación.

Alguno creía ser un profe comprometido, y quizás era otra cosa.

Alguno era un profe comprometido porque soñaba una libertad diferente de la del mercado.

Alguno era un profe comprometido porque creía poder ser libre y feliz sólo si lo eran también los demás.

Alguno era un profe comprometido porque tenía necesidad de un empujón hacia algo nuevo.

Porque sentía la necesidad de una educación distinta.

Porque quizás era solo una fuerza, un vuelo, un sueño, un empuje, un deseo de cambiar las cosas, de cambiar la vida.

Sí, alguno era profe comprometido porque, unido a ese empuje, cada uno era como…más que sí mismo.

Como…dos personas en una: por un lado, el bregar del día a día en los centros.

Por el otro, el sentido de pertenencia a una especie que quería levantar el vuelo para cambiar verdaderamente la educación.

Dos alientos en un cuerpo solo.

Alguno era profe comprometido y quizás no tuvo más remedio que continuar siéndolo, ajeno a la esperanza.

Sólo porque ya no era capaz de concebir otra manera de ser profe, ni capaz de volver a transitar obsequiosamente la sordidez de la mera supervivencia en las aulas.

Alguno era profe comprometido y ya no pudo prescindir de su segundo aliento.

[…]

Qualcuno era comunista, de Giorgio Gaber. Letra