Apidae

Descripción:

En esta familia de himenópteros apócritos podemos encontrar tanto abejas comunes como abejorros. Las abejas tienden a ser más pequeñas y de coloración amarillo-negro, además de construir sus nidos en zonas cercanas a árboles. Los abejorros, en cambio, son más grandes y marrones, y construyen sus nidos en el suelo.

El grado de sociabilidad de los ápidos es bastante diverso, ya que pueden existir tanto organismos parásitos que se aprovechan de los nidos de otras especies como individuos sociales que mantienen el nido durante generaciones o que, al formarse nuevas reinas, migran para fundar uno nuevo.

Las abejas reinas son las encargadas de reproducirse, tarea que ocupa todo su tiempo, por lo que dependen de las obreras para que las alimenten. Para evitar que otros organismos dejen descendencia, segregan una gran cantidad de hormonas que alteran el comportamiento de las obreras, haciéndolas infértiles y orientándolas al cuidado de las crías.

Es importante que el nido tenga un número limitado de reinas, por lo que solo uno de los huevos más recientes se coloca en una celda especializada para la formación de una nueva reina, la “realera”. Una vez formada, lo primero que hace la nueva reina es realizar el vuelo de apareamiento, momento en el que es fecundada y los machos pierden su capacidad reproductiva.

Las abejas obreras también desempeñan funciones muy importantes, como la construcción del nido, la recolección del polen y el cuidado de las larvas. Además, son las únicas capaces de picar, aunque solo pueden hacerlo una vez porque la bolsa que contiene el veneno está conectada al tubo digestivo. Por ello, al picar, pierden el tubo digestivo y mueren.

Lo que determina si una larva será macho o hembra es si el huevo ha sido fecundado o no. Esto significa que los machos son haploides (una única copia de los cromosomas) y las hembras son diploides (dos copias del ADN), de manera que las hembras se forman a partir de huevos fecundados.

Las especies no parásitas tienen un alto valor ecológico debido a su gran capacidad polinizadora. Estos organismos se alimentan del néctar de las flores, una sustancia muy azucarada que les proporciona la energía necesaria para mantener un estilo de vida que requiere un vuelo costoso.

Entre las diversas especies encontradas en el campus, la elegida para representar al grupo es “Apis mellifera“.