Control, gestión y explotación del territorio y sus recursos en la Hispania romana: del modelo agrimensor al paisaje cultural.

Objetivos

El proyecto en curso pretende documentar, investigar y valorar la amplia variedad de territorios y paisajes de las provincias romanas de Hispania, abarcando desde los modelos de explotación territorial hasta la percepción cultural de esos espacios.

Partiendo de los conocimientos obtenidos a lo largo de proyectos anteriores, profundizaremos en el análisis de diversos territorios peninsulares por medio de nuevas técnicas de estudio: arqueología del paisaje, geo-arqueología, geofísica y arqueo-magnetismo, entre otras. Con ello, pretendemos aportar nuevos datos al conocimiento de las formas de explotación y gestión de estas áreas, y a partir de aquí reevaluar y reconsiderar las categorías utilizadas por los agrimensores en la descripción del territorio romano, analizando conceptos como el ager divisus et adsignatus o el ager arcifinius, y contrastarlos con ejemplos concretos de paisajes hispanos.

Historial

Nuestro equipo de investigación tiene ya una larga y contrastada experiencia en lo que concierne al estudio de los paisajes antiguos de la Hispania romana. Estos se remontan a los sucesivos proyectos dirigidos por el profesor Alberto Prieto Arciniega desde finales de los años 80 del siglo pasado, que en los últimos años han hallado continuidad de la mano del profesor Oriol Olesti, que desde el año 2014 lidera el equipo con dos proyectos MINECO finalizados. El planteamiento de todos los proyectos emprendidos reside en el análisis de los paisajes antiguos tanto desde una perspectiva histórica como arqueológica y patrimonial. En el anterior proyecto de investigación, Paisajes de la Hispania romana (2): modelos de gestión de los recursos en un marco provincial en transición (II ane-V dne) (HAR2017-87488-R), se avanzó considerablemente en el estudio de diversos territorios-tipo siguiendo nuestra metodología.

Hipótesis de partida

El nuevo proyecto en marcha propone contrastar los modelos de ocupación y explotación territorial romanos, definidos en investigaciones previas, con las categorías operativas agrimensoras. Con ello se pretende verificar la validez de los datos procedentes de los agrimensores para la comprensión de los fenómenos territoriales e históricos documentados. Los modelos que hemos podido identificar muestran una notable coherencia a lo largo de tres períodos diferenciados: 1.- 200 a.C.-50 d.C.; 2.- 50-250 d.C.; y 3.- 250-500 d.C. Cabe remarcar el especial interés que la nueva propuesta de proyecto tiene en abrir esta perspectiva también al período tardo-antiguo, tanto a nivel de evolución territorial (con un complejo volumen de datos arqueológicos e históricos no siempre fáciles de interpretar), como de modelos teóricos.

El proyecto pretende desde estas coordenadas continuar contribuyendo a una mejor comprensión de los paisajes hispanos antiguos, a su estudio histórico, y a su protección y valorización patrimonial a través de su contrastación con modelos interpretativos sobre la gestión de los recursos y poblaciones en época romana. El mejor conocimiento de estos territorios, verdaderos paisajes culturales, permitirá también su puesta en valor, con la consecuente protección y disfrute por parte de las comunidades e instituciones locales.

Los paisajes romanos con los que trabajamos deben ser objeto de estudio, imprescindible para comprender su significación histórica, protección – por lo tanto, localización y delimitación – y finalmente valorización. Debemos recordar que el paisaje, es decir, la proyección sobre el territorio de las diversas formas sociales de producción, constituye un documento clave para el estudio de las sociedades antiguas. A su vez, estos paisajes constituyen el registro de los cambios históricos, sociales y ambientales sufridos por las comunidades que los habitaron, dando lugar a verdaderos “paisajes culturales”. Como documento histórico, deben ser objeto de estudio, protección, y valorización.


Hacia nuevos enfoques

Algunos aspectos de nuestro proyecto pueden vincularse también a otras prioridades vinculadas al mundo digital (creación de modelos digitales de paisajes antiguos, digitalización y transferencia de resultados) e incluso a estudios climáticos (análisis geoarqueológicos y de paisaje antiguo). En esta línea, no hay que olvidar que la propia investigación en Ciencias Sociales y Humanidades está experimentando una importante transformación asociada a la digitalización de la ciencia, sus métodos, procesos, tratamiento de datos e imágenes, así como la incorporación de tecnologías de carácter experimental, como sucede, por ejemplo, en los estudios de conservación del patrimonio cultural.