El 20 de noviembre de 2011, entrarán en vigor las normas sobre neutralidad en la red de la Comisión Federal de Comunicaciones de los EE.UU. Mientras las reglas son un intento de bienvenida en la protección de neutralidad de la red, ARTICLE 19 está preocupado porque no van lo suficientemente lejos.
Mientras la Unión Europea se dispone a adoptar sus propias conclusiones sobre la neutralidad de la red a principios de diciembre, ARTICLE 19 pide a los EE.UU., la UE y a los gobiernos de todo el mundo que apliquen normas que protejan plenamente el acceso universal y la apertura de internet.
El principio de “neutralidad de la red” protege el derecho de los consumidores a acceder a los contenidos, aplicaciones, servicios y hardware de su elección. Es esencial para el intercambio de información e ideas en Internet. El principio de neutralidad de la red también requiere que los proveedores de servicios Internet (ISP) y los gobiernos no estén autorizados a utilizar su control de Infraestructuras de Internet para bloquear contenido, o priorizar o ralentizar el acceso a ciertas aplicaciones o servicios, tales como las plataformas peer-to-peer.
En octubre de 2011, la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC) publicó un conjunto de normas llamado “Procedimientos de Queja Formal, preservación de la Internet de banda ancha abierta y Prácticas de la Industria”, destinadas a garantizar neutralidad de la red, y está previsto que entre en vigor el 20 de noviembre de 2011. Aunque la FCC aprobó el Reglamento el 21 de diciembre de 2010, no han entrado en vigor debido a su retraso en la publicación en el Registro Federal. Una serie de desafíos legales se han presentado en contra de la FCC tras la publicación de las reglas, y por lo tanto la aplicación de las reglas es probable que siga retrasándose.
Las reglas adoptan tres principios básicos: (i) todos los proveedores de Internet deben ser transparentes en sus prácticas de gestión de red, (ii) los ISPs tienen prohibido bloquear los sitios y servicios legales, y (iii) los proveedores de banda ancha fija no pueden actuar indiscriminadamente contra el tráfico de red legítimo.