Molinero, Carme; Sala, Margarida i Sobrequés, Jaume, Una inmensa prisión. Los campos de concentración y las prisiones durante la guerra civil y el franquismo. Crítica, Barcelona, 2003.

La guerra civil española no conluyó en 1939. No se trata de un mero golpe militar que pudiese darse por satisfecho con la toma del poder. Los propósitos de los sublevados eran, eliminados quienes habían hecho posibles los avances democratizadores de la Segunda República, reeducar a los recuperables y establecer unos controles que impidiesen que en lo sucesivo pudiera volver a producirse algo semejante. Ello implicaba convertir la guerra civil en algo permanente. Hay ya una literatura importante sobre la represión, pero en este volumen se intenta por primera vez, como resultado de la confluencia de una serie de líneas de trabajo en pleno desarrollo, dar una visión de conjunto de lo que representaron los campos de concentración y las cárceles como puntos fundamentales del sistema político franquista.


Josep Maymí, Josep Irla. La tenacitat d’un compromís. Barcelona: Publicacions de l’Abadia de Montserrat, 2003.

El objetivo de esta obra, fruto de la I Beca de estudio President Josep Irla i Bosch, se ha centrado esencialmente en una tarea de recuperación de la memoria colectiva de la familia Irla de Sant Feliu de Guíxols. La historia de esta familia bien podría ser la de tantas familias de nuestro país. Los Irla se adaptaron a los cambios que conllevó la entrada del siglo XX y tuvieron un protagonismo político creciente: primero en Sant Feliu, después en lo que entonces se conocía como el distrito de La Bisbal, y, finalmente, en toda Cataluña. Dedicados a la representación del corcho y adscritos al republicanismo, se convirtieron en uno de los elementos que contribuirían al apogeo republicano de la década de los treinta del pasado siglo, y también sufrirían las consecuencias.

Después de la Guerra civil vendría el exilio. Un exilio que, para la familia Irla, significaría un punto y aparte en su existencia. Comenzaba una larga etapa en la que deberían luchar nuevamente para conseguir la estabilidad económica. Paralelamente, el mayor de los tres hermanos, Josep Irla, se convertiría, en 1940, en el Presidente de la Generalitat de Catalunya en el exilio.