La cueva de Es Càrritx ha proporcionado un conjunto de hallazgos arqueológicos excepcionales.Su descubrimiento fortuito corrió a cargo de los espeleólogos Pedro Arnau y Josep Márquez. Enseguida, los responsables arqueológicos advirtieron la importancia de los restos y dieron vía libre a una investigación en la que han colaborado muchas personas, laboratorios e instituciones, y que ha culminado en diversas publicaciones.
El proyecto de investigación no puede considerarse concluido. Todavía restan sectores recónditos de la cueva y aspectos relacionados con el análisis de objetos arqueológicos que suscitan la expectativa de nuevos descubrimientos.