Una de las bases del grupo es que está constituido por algunos de los traductores en activo más prestigiosos del país, cuya obra, ya extensa, ha sido reconocida con diversos premios. Al mismo tiempo, en calidad de docentes y de investigadores, se han interesado por el estudio de las aportaciones de sus predecesores o coetáneos. Josefina Caball, por las de Jordi Arbonès; Elena Carné, por las de Montserrat Abelló; Ramon Farrés, por las versiones de Elias Canetti o de Paul Celan, y Dolors Udina, por las de Maria-Mercè Marçal. Por otro lado, el proyecto del volumen monográfico La impossibilitat possible. La traducció als Països Catalans (1975-2005) constituye un hito importante en el estudio de la traducción al catalán de los últimos treinta años, un ámbito en el cual hará falta profundizar con otras contribuciones.